La infección por hantavirus técnicamente se reconoce como una zoonosis, esto es, que se transmite de un animal al ser humano. Dado que el animal que la transmite es un roedor silvestre y que el contacto con éstos generalmente pasa desapercibido, ha sido muy difícil establecer la forma concreta o el momento en que ocurrió la infección, en la gran mayoría de los pacientes.
Lo que se sabe es que los roedores eliminan el virus en su orina, deposiciones(fecas) y fluidos respiratorios; que el virus puede persistir en el ambiente que ha sido contaminado por estas secreciones por algunas horas (persiste mayor tiempo si no hay luz y si no hay ventilación). Los roedores no se dejan ver fácilmente, ni donde han estado. Por eso saber
dónde hay virus es bastante impredecible. En los lugares donde hay roedores silvestres, debe considerarse que todo (especialmente lugares obscuros y sin ventilación) está potencialmente contaminado.
En particular para Chile y Argentina, donde está presente una cepa del virus que se denomina Andes, se ha observado que el contacto cercano y cuidar a una persona con la infección en las etapas tempranas de esta (antes de que se sepa que tiene la enfermedad), puede ser un factor de riesgo para contagiarse con el virus y enfermarse. Esto se conoce técnicamente como transmisión persona a persona.
¿Cómo se contagian las personas?
- Al respirar aire o polvo contaminado con deposiciones, orina o saliva de ratones infectados por el virus (esto es más probable que ocurra en un lugar cerrado, sin luz ni ventilación y al levantar polvo).
- Por ingerir o manipular agua o alimentos que han sido contaminadas por roedores infectados (por ejemplo frutos silvestres: mora, nueces, piñones).
- Al manipular roedores infectados y/ o sus deposiciones (roedores muertos o nidos).
- Por contagio entre personas (por ejemplo al cuidar un enfermo con hantavirus en etapas tempranas de la enfermedad).
- Menos frecuentemente también puede ocurrir por mordedura de ratones infectados.
¿Cuáles son las actividades de riesgo?
Son todas las actividades que los estudios han mostrado que aumentan el riesgo de entrar en contacto con el virus:
- Vivir en una localidad rural donde viven los roedores silvestres (IV a XII Región en Chile).
- Aseo de bodegas, galpones o casas que han estado cerrados o sin ventilación.
- Actividades agrícolas o forestales (desmalezamiento, tala de bosques, cosecha)
- Demolición o desmantelamiento de construcciones donde hay roedores silvestres.
- Actividades y exploración al aire libre en zonas rurales
- Entrar en lugares sobre todo oscuros, en que los roedores tienen acceso (leñeras, bodegas, establos, casas deshabitadas, entretechos)
- Manipular objetos (leña, herramientas, fardos de pasto, elementos deportivos, alimentos) guardados en lugares en que los roedores tienen acceso. (nidos, establos, bodegas, acúmulos de leña, matorrales)
- Recolección de frutos silvestres en lugares con presencia de roedores
- Barrer y levantar polvo donde haya evidencia de presencia de roedores
- Cuidar a un enfermo infectado con hantavirus
- Dormir en la misma cama que un enfermo infectado con hantavirus (por ejemplo una madre con su hijo o parejas sexuales)